Una de las construcciones más interesantes del Palacio San José es su Capilla .Su construcción comenzó en 1856, y fue culminada en 1859 , siendo responsable de la obra Pedro Fossati quién también fue contratado para la construcción del templo en Concepción del Uruguay.

En su vasta iconografía rodeada de pinturas bellísimas hoy nos vamos a detener en la peculiar Pila Bautismal.

Pila Bautismal de mármol de Carrara para el agua bendita. Tiene una altura de 2,70 metros y en la parte superior está coronada con una escultura representando el bautismo de Cristo por San Juan Bautista. Realizada en Italia, llegó al Palacio San José en 1857 desde Génova. El escultor fue Salvador Ximénez al que Urquiza nombra cónsul pontíficio en Montevideo siendo agente confidencial del gobierno de la Confederación Argentina cerca de su Santidad Pío IX…:
(Gionanni Maria Mastai=Ferreti; Senigallia, 1792-Roma, 1878), papa de la iglesia católica desde 1846-1878. El futuro papa recorre parte de sud-América y en su estadía en Montevideo se aloja en casa de los padres de Salvador Ximenez.

Ximenez fue escultor, pintor, músico, Cónsul Pontíficio y es en el Vaticano donde observa una pieza de mármol que lo fascino. Fue así que le pidió autorización al Papa para hacer una réplica de la pila bautismal y le envió a Urquiza una curiosa esquela que rezaba: “Sólo me detiene en Roma un objeto que en compañía de un bravo escultor estoy trabajando: es un recuerdo que mi reconocimiento y sincera amistad dedica a Vuestra Excelencia, único en su clase en esas partes de América. El Santo Padre, a quien le hablé de ese trabajo, se ha dignado con viva satisfacción admitir una copia…”. La obra fue embarcada desde Génova hacia el Palacio San José el 2 de julio de 1857. En el baptisterio de la capilla del Palacio San José se encuentra esta pila bautismal desde mediados del siglo XIX y es una de las piezas más valiosas que resguarda y exhibe esta institución.

Fuente: Museo Histórico Nacional Palacio San José.