La decoración de Navidad predispone a una época de encuentros y de alegría implícita. En este 2020 parece llegar de manera aún mas necesaria en un año tan complejo para todas las familias.
Así lo supieron ver los integrantes de las dos comparsas de la localidad de Caseros: Mayita y mi Ilusión que además de sumar alegría a las calles dejaron el mensaje de la sustentabilidad y de unión en un año en el que ya se comunicó no habrá carnaval.
Para elaborar los adornos tomaron diversos elementos que fueron recolectando y solicitando a la mismos vecinos, entre los que se destacan botellas de plástico (el cuerpo y las tapitas), latas de cerveza (el cuerpo y los extremos), vasitos de yogurt, plástico de los pañales, radiografías, tapitas de botellas, cajas tetra de leche grandes y chiquitas, maderas recicladas, tejidos y otros objetos que las comparsas tenían para sus presentaciones.
Sumar voluntades
Además de las hermosas estructuras navideñas que se pudieron lograr, lo interesante de esta convocatoria tuvo que ver con la suma de voluntades de ciudadanos que a pesar de no poder trabajar para la puesta en escena de las comparsas que cada año recorren la localidad se juntaron para un fin común.
El proyecto , pensado por Cecilia Scévola Directora del Área de Cultura, Turismo y Deporte y por Alejandro Mazaeda encargado del Área Técnica de la Dirección de Obra pretende embellecer a la población brindando el concepto de sustentabilidad en el diseño de sus estructura con reciclados de objetos.